La quiebra de General Motors profundiza la crisis social en EEUU
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- Categoría: EEUU
- Publicado: Jueves 04 de Junio de 2009
(IAR Noticias) EEUU - La caída del gigante automotriz marca la profundización del colapso financiero industrial imperial estadounidense (como emergente de la crisis financiera recesiva) y señala el tercer gran caso de bancarrota en la historia de EEUU, tras la caída del pulpo financiero Lehman Brothers y del gigante de las telecomunicaciones WorldCom.
El Estado federal aportará US$ 50.000 millones y controlará el 60% del capital de la nueva empresa, mientras que el Estado canadiense y la provincia de Ontario desembolsarán 9.500 millones de dólares y se quedarán con el 12% de las acciones.
De esta manera, la administración Obama continúa la tendencia -comenzada en la era Bush- de salvar entidades quebradas del sector privado con fondos estatales de los impuestos aportados por toda la sociedad estadounidense.
Mediante la operación de "salvataje" estatal, GM blanqueará (con fondos públicos) más de US$79.000 millones en deuda, ahorrará miles de millones despidiendo fuerza laboral, cerrará más de una docena de fábricas y reducirá su red de concesionarios en un 40%, a 3.600.
GM confirmó que el grupo va a pasar de 62.000 obreros sindicalizados en 2008, a 38.000 en 2011
De acuerdo con los expertos, la desocupación es el problema más profundo de la economía y la sociedad estadounidenses. Según un reciente informe oficial, durante el último trimestre se perdieron en este país más de 220 mil empleos, lo que elevó a 9,9 millones el número de personas sin trabajo.
La tasa de hispanos desocupados residentes en EEUU se mantuvo entre las más elevadas y en abril de 2009 alcanzó un 8,9 por ciento, llegando a la cifra de casi 1.980.000 desocupados.
Por estas horas, medios y analistas norteamericanos coinciden en que la desocupación (como emergente de la recesión financiera industrial) se ha convertido en la prioridad absoluta de la agenda de Obama y su equipo.
La crisis social (consecuencia de la caída del consumo y los despidos laborales) ya se perfila como un potencial emergente de la crisis recesiva- laboral que detonó escalonadamente como consecuencia de la crisis financiera en EEUU.
Lo que hace unos pocos meses sonaba como un panorama fantástico para el Imperio norteamericano (las huelgas y los conflictos sociales) es un escenario de corto plazo que ya están manejando entre líneas analistas y medios norteamericanos a la luz de la crisis del sector automotriz y de las quiebras empresariales que están desatando una creciente ola de despidos en EEUU.
El estallido de la "burbuja inmobiliaria", la crisis financiera y la crisis del sector automotor en EEUU han dejado a cientos de miles de trabajadores buscando empleos en los mismos sectores, en los mismos lugares y al mismo tiempo, coinciden medios norteamericanos.
Según los datos oficiales, el empleo en el sector automotriz y el de las partes de vehículos ha caído en más de 400.000 en los últimos tres años.
En un orden secuencial, para que la crisis se convierta en "social" (el desenlace) tiene que haber una convergencia interactiva de la "crisis financiera" (los mercados del dinero), la "crisis estructural" (la economía real) y la "crisis social" (el impacto de la crisis económica-financiera en la sociedad).
De acuerdo con los expertos, la confluencia interactiva de estos tres factores es lo que va a posibilitar, a corto plazo, el desenlace de la "crisis social" con posibles huelgas y conflictos sociales en EEUU, lo que parecía impensable poco tiempo atrás.
No obstante el desembolso sin precedentes de US$ 4 billones realizados por el Estado estadounidense para salvar al sistema capitalista privado de la quiebra, los "rescates" -tanto los de Bush como los de Obama- no han tenido hasta ahora ningún resultado para solucionar la crisis financiera recesiva que, como efecto más inmediato, contrae el crédito, desacelera la economía y el consumo, e impacta en la economía real con quiebras generalizadas de empresas y despidos masivos de trabajadores.