Gobernadores patagónicos en sintonía con el ajuste
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- Categoría: Entrevistas
- Publicado: Martes 09 de Octubre de 2018
“Frente a las políticas de ajuste varios de los gobernadores patagónicos parecen estar de acuerdo”, afirma Marcelo García. En esta entrevista realizada por Mario Hernandez, el integrante de Nuevo Proyecto Energético Latinoamericano (NPEL) analiza la situación social que atraviesa nuestra Patagonia, una de las zonas más ricas en recursos naturales de Argentina.
(Mario Hernadez para Red Eco) Patagonia- Por los despidos, los trabajadores han denunciado que en las provincias patagónicas prácticamente se ha decretado el cierre de la dependencia de Agricultura Familiar. Esta preocupación se la trasladamos a Marcelo García para iniciar nuestro diálogo sobre la situación en las provincias patagónicas.
Marcelo García: Esa es una de las tantas vertientes que tiene el derrame del ajuste. Lamentablemente lo que derrama es el ajuste, el recorte y las consecuencias sociales vinculadas al aspecto económico que impactan de lleno sobre estos trabajadores de la Economía popular, que juegan un papel, porque donde no puede el consumidor acceder a los grandes centros de comercialización de productos alimentarios, los trabajadores de la Economía popular lo resuelven en parte.
En el marco del ajuste anunciado y en parte ya concretado por el gobierno nacional, que viene a corroborarse y a ampliarse en las últimas semanas y, fundamentalmente, por las declaraciones del Presidente Macri como las del Ministro Dujovne, de alguna manera presentan un complejo entramado de ajuste para el conjunto de las provincias argentinas.
En la Patagonia en particular tienen su efecto más concreto haciendo especial hincapié de que estamos hablando de provincias sumamente ricas en cuanto a recursos naturales, a capacidad de producción, de exportación. De hecho el propio Presidente hace especial hincapié en la importancia que va a tener en un futuro, ya veremos cuan lejano o cercano, la producción petrolera en Vaca Muerta y demás.
Pero, mientras tanto, los efectos del ajuste son complicados y de un impacto fuerte sobre el conjunto de los habitantes de la región en el marco de estas políticas acordadas con el FMI para la obtención del crédito que después permitiría pagar la propia deuda con el Fondo.
En este marco es importante comprender cuáles son estos alcances y cómo se va a producir porque además para mí, sobre la base de esto que mencionabas de intentar encontrar la punta de la madeja de este embrollo que nos tiene a todos complicados en la vida cotidiana pero a la vez preocupados, angustiados, como hace mucho que no nos sucedía; estamos pendientes de si el dólar sube cada vez que habla Macri, suben o bajan las acciones, como si eso nos fuera a facilitar o mejorar las condiciones de vida cuando en realidad es una timba de la que no participamos.
Toda esta política de ajuste tiene un impacto y un mecanismo que en función de estudiar los números, los que fueron anuncios o pre anuncios en cuanto al ajuste, cuáles son las implicancias del Pacto fiscal firmado el año pasado, cómo ese entramado que parece chino básico para el que va a laburar todos los días y la guita no le alcanza, tiene una explicación.
Hay toda una política de ajuste y se van confirmando algunas de esas tendencias de recorte del gasto público, que es el mecanismo central por el que se avanza sobre el ajuste, que busca por un lado reducir los gastos del Estado, cuando se trata del Estado Nacional transferírselo a las provincias, a provincias que por otro lado indudablemente tal como están hoy no podrían afrontar el traslado de esos gastos, porque casi todas, inclusive las provincias con importantes recursos naturales están con déficit, con situaciones financieras muy complicadas, dando aumentos a los trabajadores del Estado que no superan el 15%; no podrían afrontar, por ejemplo, el subsidio al transporte que el Estado Nacional les acaba de transferir.
Por otro lado, le subió los fondos coparticipables a partir del Pacto fiscal que firmaron las provincias con el gobierno Nacional el año pasado, todas salvo dos. Los gobernadores han recibido mayor cantidad de fondos, mayor cantidad de ingresos por coparticipación. Uno podría pensar que por eso se podrían hacer cargo del ajuste, y en realidad no, porque ese es un mecanismo nefasto, que les va a impactar directo al bolsillo de los trabajadores y al conjunto de los trabajadores de las provincias, porque los gobernadores van a decir que no pueden hacerle frente a las transferencias de lo que el Estado nacional no va a cubrir y en definitiva van a terminar pagándolo los que menos tienen. Por ejemplo, en el caso del subsidio al transporte, el Estado nacional lo traspasa a las provincias y que éstas lo cubran, pero van a decir que no lo pueden hacer, entonces van a aumentar la tarifa del colectivo.
Por ende, los que terminan pagando el pato de la boda de este ajuste es el laburante que se tiene que tomar el colectivo para ir a trabajar y así con casi todos los rubros que incluye este ajuste. Las asignaciones familiares que hace un mes atrás se anunció que se sacaba la zona desfavorable, que históricamente se venía pagando en las provincias patagónicas y en otras provincias del país pero en las patagónicas era donde más concentración había, por las características de las condiciones de vida, donde no solo es más dura la vida sino que todo cuesta más en función del viento, el frío, la distancia, etc. Eso se suspendió durante 30 días pero no definitivamente, la reducción como mínimo significaría un 50% de las asignaciones familiares como se plantea en el Proyecto de presupuesto, lo cual, de aprobarse, tendrá un impacto muy fuerte sobre aquéllos que las reciben.
El Fondo federal solidario, que es el fondo sojero que se destinaba exclusivamente para la obra pública, o que debía ser destinado para eso, es plata que no entra y por lo que luego no se construyen obras públicas en el interior del país.
Se habla de transferirle a las provincias el incentivo docente, que se ganó allá por los ´90 en una enorme pelea en épocas del menemismo, contra el ajuste a la educación y que se transformó en el Fondo de incentivo docente para que los salarios tuvieran un extra adicional.
Si las provincias no tienen para pagarlo se pierde, y el que pierde es el trabajador docente. Los fondos para el Fonavi, con la necesidad en territorios tan amplios como los de la Argentina y mucho más en tiempos como los actuales donde un alquiler es carísimo, no se van a poder construir viviendas para el conjunto o para intentar resolver parte de los problemas de la sociedad que no es propietaria.
Y así, un sin número de medidas, que también tienen un mecanismo político perverso, porque si sos gobernador de una provincia y dependés de mis fondos coparticipables, te tengo atado políticamente, con vistas a un posible futuro en el 2019 de intento reeleccionista. En definitiva, el gobierno nacional ajusta y los gobernadores le transfieren el ajuste a los usuarios y consumidores y a los trabajadores de conjunto.
M.H.: La situación de la Patagonia es particularmente difícil, por ejemplo, se les ofrece a los docentes de Santa Cruz un incremento del 2%.
M.G.: No por nada dicen que el mejor ejemplo del ajuste respecto de lo que debería hacer el gobierno nacional es lo que está haciendo la gobernadora de esa provincia, Alicia Kirchner, con los trabajadores estatales.
M.H.: Luego otra información que nos llegó fue el saqueo a un local de Carrefour en la ciudad de Comodoro Rivadavia.
M.G.: Son situaciones inevitables, más allá de todas las presunciones sobre la organización o no organización, intento de campaña política o no, de desestabilización o no, se pueden hacer muchas conjeturas, pero lo que no se puede negar es que hay un sector de la sociedad que tiene hambre y necesita darle respuesta a sus hijos.
M.H.: Una sociedad muy golpeada la de Comodoro Rivadavia que no se ha repuesto todavía de aquella inundación que llenó de barro la ciudad.
M.G.: Claro, una ciudad que viene de poco más de un año de haber padecido un temporal histórico que la tapó de barro a buena parte y generó lo que todos vivimos en abril del año pasado con evacuados, a raíz de un temporal que arrasaba con todo lo que venía y luego un lodazal de dos metros de altura y milagrosamente hubo solo un fallecido. Algo inexplicable pero afortunadamente fue así y todavía no se termina de recuperar. Hay comerciantes y vecinos que perdieron absolutamente todo, que el Estado les dio una mínima ayuda para salir de ese trance, pero sin posibilidades de recuperar lo que perdió ni de tener un futuro. Ni hablar de las obras de infraestructura, si vuelve a llover como aquella vez las condiciones son infinitamente peores. Pero sobre esto el gobierno nacional decidió y creo, y ojalá me equivoque, pero pienso que con la complicidad de buena parte de los gobernadores de las provincias y hablo específicamente de la Patagonia, porque ante el accionar que han tenido frente a las políticas de ajuste varios de los gobernadores de las provincias parecen estar de acuerdo.
Fundamentalmente hay dos que están de acuerdo, los de Neuquén y Río Negro. No han enfrentado los anuncios de ajuste de ninguna manera. Hay otros dos que llama la atención el silencio y la escasa verborragia para decir lo perjudicial que está siendo esto para sus habitantes que son La Pampa y Tierra del Fuego. Santa Cruz se ha manifestado en contra de algunas de las políticas de ajuste no con la vehemencia que creo necesaria, y Chubut es una de las pocas que se ha puesto al frente de enfrentar el ajuste, a sabiendas de ser la más perjudicada, porque cuando se hacen los cálculos de lo que significa el ajuste para las provincias de la Patagonia respecto de lo que significan los recursos de coparticipación que aumentan, hay algunas que inclusive terminan teniendo mayores ingresos. Y claro, ningún gobernador está dispuesto a perder ingresos con el riesgo de que la provincia le estalle como pasó en Chubut con más de 40 días de paro de los trabajadores estatales y los docentes; y mucho menos poniendo en juego sus posibilidades de reelección.
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