
Mercado laboral registrado: estado de situación actual
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- Categoría: Trabajadores
- Publicado: Martes 08 de Agosto de 2017

Entre mayo 2016 y mayo 2017, los datos del Ministerio de Trabajo muestran la creación de 176.100 puestos de trabajo. Sin embargo 6 de cada diez son trabajos de menor calidad. Los 4 restantes corresponden a trabajadores registrados entre los sectores Público y Privado. El siguiente informe del Instituto de Estudios y Formación -CTA Autónoma (IEF) profundiza en estos números y muestra la pérdida de la calidad laboral y de los ingresos promedios como la contracara del aumento del empleo.
(Instituto de Estudios y Formación- CTA Autónoma) Argentina - En momentos donde el Gobierno de Mauricio Macri impulsa otra avanzada contra los derechos laborales a través de una nueva reforma laboral, el presente informe busca presentar el panorama del mercado de trabajo registrado, su evolución en relación a 2016 y sus perspectivas, a partir de los últimos datos brindados por el Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social de la Nación (MTEySS), correspondientes al mes de mayo de 2017.
Según el último informe publicado el 27 de julio por el MTEySS, correspondiente a mayo de 2017, la cantidad de trabajadores registrados en nuestro país era de 12.106.600. Esto implica un aumento de 176.100 trabajadores, en relación con igual mes de 2016.
Sin embargo, cuando se analiza en profundidad dicho incremento en el número de trabajadores registrados, es posible señalar que el 58,2% (102.600 trabajadores) corresponde a trabajos de menor calidad como monotributistas, autónomos, de casas particulares o monotributistas sociales, en el sentido de que disponen de menor cobertura social, salario, condiciones laborales y estabilidad que los trabajadores Asalariados del Sector Privado. El 41,8% (73.500 trabajadores) restante corresponde a trabajadores registrados entre el Sector Público y los Asalariados del Sector Privado.
Para el sector privado en su conjunto, se trata de una pérdida de calidad en el empleo y los ingresos del promedio de los trabajadores, ya que lo que crece son los empleos caracterizados por la flexibilización, a pesar de estar definidos como trabajadores registrados. Esto se pone de manifiesto en el hecho de que son justamente los trabajadores autónomos y monotributistas aquellos que sufren de mayor incertidumbre e inestabilidad en relación con la duración de su empleo; deben pactar salarios de manera individual; muchas veces no disponen de condiciones aptas de higiene y seguridad en sus espacios de trabajo; sufren también de flexibilidad horaria, en términos de la extensión de la jornada laboral, así como también deben desarrollar múltiples tareas al mismo tiempo.
A continuación se detalla la evolución de las distintas categorías de Trabajo Privado registrado, evaluadas por el MTEySS entre mayo 2016 y mayo 2017.
Evolución de Asalariados registrados.
La variación entre mayo 2016 y mayo 2017 en los Asalariados Registrados es casi nula, de tan sólo de 30.800 nuevos trabajadores. Sin embargo, la cuestión se agrava si observamos que existió un crecimiento de 90.300 trabajadores desde mayo 2016 a marzo de 2017, el cual cayó en los siguientes dos meses, con una pérdida de 59.500 trabajadores registrados.
Evolución de Monotributistas registrados.
En el caso de los Monotributistas, se observa un incremento de 68.000 trabajadores registrados. Dicho crecimiento se mantuvo casi constante durante todo el año, lo que puede dar cuenta del fenómeno de flexibilización de la mano de obra de nuestro país.
Como otros factores a tener en cuenta para analizar el crecimiento del Monotributo, podría señalarse el crecimiento del Empleo Público ocurrido durante2017. Cabe recordar que desde hace varios años el Estado incorpora personal a su planta bajo la modalidad de Contrato, lo que implica que los trabajadores deban facturar por las horas trabajadas, aumentando así el nivel de precarización en el sector público. Por otro lado, el fomento que hace el gobierno Cambiemos al
“emprendedurismo” como camino para el éxito individual de los trabajadores, lleva a que muchos se intenten asegurarse una vida digna a través de micro - emprendimientos que requieren de la inscripción al monotributo.
Evolución de Monotributistas Sociales.
El “emprendedurismo” señalado como una de las causas del crecimiento de los Monotributistas también podría explicar el aumento de los Monotributistas Sociales, ya que es en las barriadas y los sectores populares donde los oficios y los micro-emprendimientos productivos, propios de la economía informal, tienen un gran peso como opción para mitigar, no resolver, el problema de la pobreza.
Al mismo tiempo, vale señalar que el Monotributo Social está destinado para aquellos que integran cooperativas de trabajo o que impulsan emprendimientos de hasta 3 integrantes, y que es compatible con la Asignación Universal por Hijo, la Asignación por Embarazo para la Protección Social y las pensiones no contributivas a madres de 7 o más hijos, por lo que no implica el riesgo de perder estos beneficios.
Evolución de Autónomos registrados.
En el caso de los trabajadores Autónomos, se observa una disminución de 9.000 inscriptos desde mayo de 2016 a mayo de este año. Sin embargo, dicha disminución es aún mayor si se considera que en noviembre de 2016 se llegó a un pico de 421.600 registrados y actualmente es de 406.600, lo que implica una pérdida de 15.000 trabajadores Autónomos registrados.
Evolución de trabajadoras de Casas Particulares.
Se observa un incremento de 11.000 inscriptos en el Régimen Especial de Contrato de Trabajo para el Personal de Casas Particulares, creado por la Ley N° 26.8441. Esta evolución es importante ya que el trabajo en casas particulares es, junto con el trabajo rural, donde se concentran los mayores niveles de irregularidad, informalidad y flexibilidad. Sin embargo, también debe decirse que, a pesar de haber tenido gran éxito al momento de la creación de dicho Régimen - observable en la cantidad de inscriptos entre abril y diciembre de 2013-, los valores se han mantenido relativamente estables desde 2014 a la fecha.
Trabajo Asalariado registrado: composición
Al desglosar el trabajo Asalariado, se observa un incremento de trabajadores registrados en 9 de los 14 sectores analizados. Los más significativos son la Construcción (31,2 mil trabajadores), el Comercio (11,2 mil trabajadores), Servicios sociales y de salud (8,8 mil trabajadores) y Enseñanza (6 mil trabajadores). Por otro lado, las disminuciones más importantes se dieron en la Industria manufacturera (-34,2 mil trabajadores) y en Explotación de minas y canteras (-4,4 mil trabajadores).
En el rubro de la Construcción, luego de una caída de 7.700 trabajadores registrado entre noviembre y diciembre de 2016, se observa un constante crecimiento hasta los 436.600 inscriptos en mayo de 2017. Podría considerarse que las elecciones legislativas de este año son un factor que influye en la reactivación de la obra pública, elevando así la cantidad de trabajadores registrados.
El saldo positivo observado entre mayo de 2016 y mayo de 2017 en el rubro Comercio oculta una gran pérdida de puestos laborales registrados entre enero y abril de 2017. En dicho período, se pasó de 1.175.300 registrados a 1.157.200 en abril, lo que significa la pérdida de 18.100 trabajadores registrados. Aquí, podría afirmarse que la recesión económica resultante de los techos salariales en las paritarias y la constante inflación que erosiona los salarios han afectado la actividad comercial, por lo tanto la continuidad laboral y la generación de empleos (en mayor medida, los formales). Recién en mayo se registraron 1.900 trabajadores más, para llegar a los actuales 1.159.100.
Algo similar a lo ocurrido en Comercio se observa en el rubro de la Enseñanza. A pesar de identificarse un incremento frente a 2016, debe destacarse que la cantidad de trabajadores registrados sufrió un constante retroceso -casi 20.000 trabajadores- desde mayo de 2016 a enero de 2017, repuntando a partir de dicho mes hasta mayo del corriente año.
De los tres rubros destacados, debería hacerse la salvedad de que la Construcción es un rubro de trabajo temporario y donde las condiciones laborales y de ingreso distan mucho de ser las idóneas. La obra pública como motor de la generación de empleos es el ejemplo claro de la temporalidad y la falta de estabilidad a la que se ven afectados los trabajadores de la construcción. Por este motivo, a pesar de ser parte de los empleos Asalariados registrados, podría considerárselo como uno más de los rubros que incrementa la precariedad laboral en nuestro país.
Por el lado de las retracciones más significativas, se destacan los rubros relacionados directamente con la actividad productiva fabril del país.
En principio, la Manufactura, con un decrecimiento de trabajadores registrados que se arrastra de corrido durante todo el período analizado, con un efímero repunte en el mes de marzo, pero para volver a caer hasta mayo. En dicho rubro, la pérdida asciende a 34.200 puestos laborales formales.
En el rubro de Transporte, Almacenamiento y Comunicación se observa un crecimiento entre junio y diciembre de 2016, para sufrir luego una caída constante hasta mayo de 2017, que arroja una pérdida de 5.500 trabajadores en este último período señalado. Podría arriesgarse que la disminución de la actividad económica general nacional repercute directamente en el rubro analizado.
Por último, se da una disminución continua en el rubro Explotación de Minas y Canteras durante todo el período analizado. Esto conlleva la pérdida de 4.400 puestos laborales registrados. Es posible señalar que la repercusión de la crisis económica internacional afecta a las inversiones de las empresas transnacionales mineras, a lo que debería sumarse la disminución de los valores de mercado de las materias primas que ellas extraen. Sin embargo, hay que recordar que las empresas del sector gozan de una batería de ventajas arancelarias, impositivas y territoriales a las que debe agregarse la quita de retenciones a las exportaciones que el gobierno Macri les otorgó a pocos meses de asumir.
Consideraciones finales
Las retracciones más significativas se han dado en sectores de la economía caracterizados por generar mayor cantidad de empleos en relación de dependencia. Esto significa que son empleos de mayor calidad relativa, en términos de estabilidad, determinación de funciones, goce de aportes jubilatorios y seguridad social.
Por lo tanto, así como se demostró que el incremento de trabajadores registrados es relativo si se analiza la evolución de cada rubro a lo largo del tiempo, ya que en la mayoría de ellos se verifican grandes retracciones en los últimos meses, también debe llamarse la atención sobre la pérdida de empleos registrados de calidad (relativa) y la creciente generación de empleos de menor calidad como los Monotributistas, Autónomos y Monotributistas sociales.
La clase trabajadora argentina se enfrenta nuevamente a una avanzada de los patrones, de la mano de la reforma laboral que el gobierno Macri comienza a destapar -cada vez más- a través de los medios de comunicación.
A pesar de no conocerse públicamente algún borrador de ley o plan al respecto, ya se han desplegado algunas iniciativas que permitirían afirmar que la reforma laboral ya está en marcha.
Los techos salariales establecidos en los acuerdos paritarios de este año, aceptados por la burocracia sindical, han generado una pérdida real de los salarios y un mayor nivel de ganancia para los patrones. Al mismo tiempo, la renegociación de Convenios Colectivos como el de los petroleros patagónicos, los trabajadores rurales, o los mecánicos y automotrices, incluso por los estatales de UPCN, implica justamente una política de flexibilización laboral que avanza sectorialmente.
El gobierno de Macri consolida la ofensiva del capital contra los trabajadores en su conjunto, buscando una reconversión del mercado de trabajo en pos de mejorar la correlación de fuerzas entre empleador y empleado, siempre a favor del primero y sus ganancias. Los datos relevados en este informe pretenden dar cuenta de ello.