Al norte y al sur argentino
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- Categoría: Pueblos Originarios
- Publicado: Jueves 28 de Octubre de 2010
(Analia Rodriguez – Red Eco) Salta – Chubut - Las 80 comunidades originarias que viven al norte de la provincia de Salta, agrupadas en la Coordinadora de Organizaciones Kollas Autónomas denominada Qullamarka, con jurisdicción originaria dentro del territorio Indígena, discutirán y aprobarán durante el mes de noviembre el Estatuto Autónomo que les permitirá avanzar en su organización social jurídica y política.
El Qullamarka está integrado por miembros de las comunidades kollas (Markas) y fue creado el 6 de noviembre de 2007, durante una asamblea en el pueblo de Santa Victoria Oeste y representa a la Unión de Comunidades Aborígenes Victoreñas (UCAV), Asociación de Comunidades Aborígenes de Nazareno (OCAN), Consejo Indígena de Iruya (CIKDI), Comunidad Kolla TINKUNAKU, y la Comunidad Indígena de la Alta Cuenca del Río Lipeo de los Toldos.
Las comunidades plantean la necesidad de ejercer su autonomía en el marco del Estado de Salta, como una de las formas de aplicación del derecho supremo a la libre determinación reconocido en el actual sistema jurídico argentino.
El Estatuto tiene dentro de sus objetivos asegurar la propiedad comunitaria en el marco de la vida comunitaria dentro de los Ayllus y Markas –comunidades- la protección, conservación y uso sustentable del territorio Kolla, con su pacha, biodiversidad, sus aguas, aires, minerales, y todo lo que éste contiene.
Por otro lado, en Chubut, la comunidad Enrique Sepúlveda informó que el viernes al mediodía fueron nuevamente agredidos por el estanciero Héctor Guajardo y su yerno Alberto Hemadi. Los integrantes de la comunidad fueron baleados por los estancieros.
El ataque producido tiene su origen en el conflicto por una porción de territorio que la comunidad mapuche Enrique Sepúlveda habita desde 1937 y del que las familias Guajardo y Hemadi, de El Maitén, pretenden adueñarse desde hace 10 años.
El lonko Abelardo Sepúlveda denunció en más de una oportunidad, distintos atropellos. El viernes 22 de octubre se presentaron en el lugar, con maquinarias, integrantes de estas familias, momentos después incendiaron una ruka ubicada dentro del territorio de la comunidad. Cuando el lonko se acercó para ver cuál era la situación, tres personas comenzaron a disparar contra él y un joven de 18 años que lo acompañaba. El joven logró ponerse a resguardo pero a Abelardo una bala le rozó la cabeza.
No es la primera vez que la comunidad Sepúlveda denuncia este tipo de situaciones, y responsabilizan a la justicia y al gobierno provincial por cualquier nuevo ataque que pueda sufrir la comunidad.
El pueblo Mapuche y la comunidad exigieron respeto, para poder seguir desarrollando y perpetuando la vida en su territorio, teniendo en cuenta el mundo natural, el entorno social y cultural al cual tiene derecho.
Si bien esta comunidad cuenta con el Relevamiento territorial, realizado por el INAI en el marco de la ley 26.160, no deja de sufrir atropellos, amenazas y violencias.
La comunidad Sepúlveda tiene fundadas razones para temer por la integridad física y la vida de sus integrantes, ya que estos terratenientes han venido amenazando, hostigando e ingresando al territorio armados. Preocupando su fuerte vinculación con el poder político. Son muchas las denuncias que hasta el momento se han venido realizando, en el juzgado civil y en la fiscalía.
Hace un año atrás, en el marco de este mismo conflicto, la Justicia Penal de Esquel condenó al estanciero Alberto Hemadi a 45 días de prisión en suspenso por el delito de desobediencia a una orden judicial. Los hechos consistieron en introducir durante el año 2008, en tres oportunidades, animales vacunos en el territorio tradicionalmente ocupado por la Comunidad Mapuche Enrique Sepúlveda, violando una medida cautelar dictada en 2007 por el Juez Civil Claudio Petris.
A pesar de lo exiguo de la condena, fue la primera vez que la justicia local condenó a un estanciero por hechos de estas características.