El Instituto Superior del Profesorado Joaquín V. González fue fundado en 1904 y nunca tuvo un edificio propio. Desde hace varias décadas, los alumnos que cursan las 16 carreras de profesorado, más talleres y postgrados, ocupan las aulas que les presta el colegio secundario Mariano Moreno, sobre Avenida Rivadavia al 3500. El espacio que tienen actualmente no es suficiente y desde hace varios años se dictan clases en muy malas condiciones de infraestructura.

Los docentes y alumnos rechazan el nuevo edificio y denuncian además que está en duda si su estructura, que fue hecha para oficinas, puede soportar el peso de tanta cantidad de gente.
El nuevo espacio asignado al Instituto es un fiel reflejo del lugar que ocupa la educación en la gestión de Mauricio Macri.

 

Martín Cifuentes es profesor del departamento de historia y comenta que cada año que pasa, tienen menos capacidad presupuestaria. “Sabemos que el gobierno de Macri tiene la intención de continuar recortando la partida presupuestaria para este año. En este momento tenemos cuatro encargados de limpieza y resulta insuficiente para los dos pisos que ocupa el Instituto. Muy probablemente, como viene la mano, no se tome más gente. Imaginate lo que va a ser la limpieza en 11 pisos…”


A las irregularidades del nuevo edificio, se suman las de la mudanza. La semana pasada comenzó el traslado de materiales administrativos y muebles. “Se están mudando documentos en autos particulares, y eso no es legal. Este mes se cerró la biblioteca para embalar los libros, cuando en una semana hay exámenes y se dejó a los estudiantes sin la posibilidad de utilizar ese recurso. Además, las clases empezarían el lunes 13 de abril, prácticamente un mes más tarde de lo habitual”, dijo Cifuentes.

En una asamblea que se realizó anoche, estudiantes y docentes acordaron no permitir el inicio del ciclo lectivo si se concreta la mudanza. También establecieron acciones concretas: el próximo sábado a las 9 horas se movilizarán a Rivadavia al 3.500 para escrachar al Consejo Directivo del Instituto en reclamo de que no se avance con la mudanza. El jueves de la semana próxima se trasladarán al nuevo edificio, donde por primera vez se desarrollarán los exámenes de marzo, y cortarán la intersección de Ayacucho y Córdoba.
Paralelamente, la asamblea decidió trabajar para presentar un recurso de amparo colectivo con el objetivo de impedir la mudanza, y acudir en los próximos días a la Defensoría del Pueblo.
Los docentes y alumnos del Joaquín V. González continuarán reclamando un espacio digno. El año pasado realizaron varias protestas frente a la legislatura porteña y hablaron con funcionarios del área, pero nunca obtuvieron respuesta. Martín Cifuentes expresa el reclamo: “no es que no queremos mudarnos porque queremos quedarnos en este edificio. Quedarnos acá tampoco es una solución. Reclamamos lo que nos corresponde: un edificio único, seguro, digno y para todos”.

Producción periodística: Margarita Pesoa - Red Eco

Producción fotográfica: Ezequiel Saucedo - Red Eco

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