Slam copa FILBA
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- Categoría: Más del Pais
- Publicado: Viernes 03 de Octubre de 2014
Este sábado 27 de septiembre, a las 23 hs se llevó a cabo por segundo año consecutivo el Slam copa FILBA, modalidad Alianzas, en el teatro Margarita Xirgú, Chacabuco 875, en el barrio de San Telmo (CABA). El mismo duró alrededor de 4 horas. En la sala sobre las butacas rojas más de 300 personas esperaban inquietas a que la batalla oral comenzara. La luz cálida armonizaba la espera. Pasadas las 24 hs, de a grupos fueron subiendo al escenario y exhibiendo su talento. Red Eco Alternativo (Manuela Cucchetti-Red Eco) Ciudad de Buenos Aires- Ahora ¿Qué es el Slam? Es una competencia de poesía oral, un recital de literatura y performances, que ya hace unos años es llevado adelante en la Argentina, donde las balas de esta guerra son los versos. Las personas cuentan con 3 minutos 20 segundos para mostrar su destreza en el ring, ante la mirada atónita de los jueces y el público.
El sábado varias personalidades slameras se hicieron presente: Alejandro Beron, Jorgelina Mandarian, Lluvia Dorada (So Sonia y Dogo Nauta), Mariana Bugallo, Diego Arbit, Mhoris Em, Catarsis, Elemento Disruptivo (editorial), Mariana Mendez, Joaquito Carrasco, Ualla (duo español), Cecilia Szperling y Lucas Darko, entre otrxs.
El invitado especial de la noche fue Osvaldo Vigna (artista, escritor), quien expresó “es un placer estar en un espacio de tanta libertad” antes de comenzar la interpretación de uno sus escritos:
“¿Quien creó las maquinas? ¿Las maquinas tienen alma? ¿La carne es alma almacenada? ¿Las maquinas se alimentan con picadillos de almas? Los pastores electrónicos ¿venden ostias a las maquinas? ¿Sueñan los pastores electrónicos con las ovejas humanas? ¿Cuántos discos rígidos caben en el alma de un papap? ¿Cuánto apagaríamos por una maquina que obture la luz? el papa negro de las profecías de Nostradamus ¿Convida ostias digitales a los maquinistas de almas humanas? Bill Gates ¿es una maquina humana o la cara humana una maquinaria sangrienta sin alma? ¿Microchip o musculo?”
De la contienda, resultaron ganadores Nicolas Canedo y Daina Leonelli. Se llevaron el trofeo con un texto hecho a tiempo. 3 minutos y 34 segundos, donde la frase que se repetía era “quiero un abrazo que detenga el tiempo”, que los dejaba a los dos abrazados en el centro del escenario. Acompañó la noche con sus canciones Sato Valiente.
Organizaron este evento lleno de palabras Sagrado Sebakis, Diego Arbit, Andy Sakkal, Emiliano Romero, Tomas Larrinaga y Lucila Bucari. Los jueces y quienes dirigieron la riña fueron Eric Barenboim, Nanu Na Un e Ignacio Pierini.
Un poco de historia
El padre de este nuevo movimiento de literatura oral, ahora desparramado y diversificado, es Marc Smith, quien en 1985 en Estados Unidos, mientras era poeta y trabajaba en la construcción, empezó a organizar una serie de recitales de poesía en un club de jazz, el Get Me High Lounge (Salón Colócame), buscando una manera de dar vida al formato de recital de micrófono abierto. Esta semilla fue el inicio, la base de un estilo de poesía que terminó extendiéndose por el mapa. El origen de la palabra Slam, como alguna vez explicó Marc Smith, estaba inspirada en “Chelem” que se usa para definir torneo tanto en la lengua inglesa como en la francesa.
Este fenómeno que crecía, fue captado por Sagrado Sebakis, quien con una visión muy afilada vio que la ola ya recorría caminos latinoamericanos y la surfeo. La hizo propia, y junto a Sol Fantin, la llevaron adelante por primera vez en el Centro Cultural Pachamama, de Villa Crespo, que luego de varias clausuras, terminó convirtiéndose en lo que ya era: una casa de artistas.
Una vez en tierras argentinas, desde el principio la convocatoria fue enorme, tanto en cantidad como en calidad. Los poetas que pasaron por esta experiencia paracultural, donde se pone en juego más que el cuerpo a la hora de leer y recitar, son escritores reconocidos, con una amplia trayectoria en letras y en la literatura contemporánea, quienes se mezclan y confunden entre jóvenes entusiastas que ya se apoderaron de esta modalidad de la poesía e invadieron varios espacios de la ciudad con la palabra.
Más de uno quedó maravillado por la consigna, la estética y las locuras que se sucedían en la arena de batalla, uno de ellos fue Tomas Larrinaga, quien después de presenciar varios Slams con su cámara en mano, produjo una película/documental donde se cuenta la historia del Slam en Argentina. Se llama SILENCIO, la palabra vuelve a tomarlo todo! y se proyecta frecuentemente en la ciudad de Buenos Aires, de manera libre y gratuita.
Expansión del Slam
El slam no solo se realiza en Capital Federal, sino que ya se viralizó y se está llevando a cabo en varias provincias del país como Santa Fe, Chaco, en el Sur del país, Mendoza y próximamente Mar del Plata y Tucumán. Asimismo el Slam ya se realizó este año en la 39 Feria Internacional del Libro de Buenos Aires, en el predio de la Sociedad Rural. Organizado por Sebastian, el mismo se desarrollo en la Sala Jorge Luis Borges donde mucha gente disfruto de la experiencia y ahora en zona Sur, el Slam ya va por su segundo torneo que el cual se realizará el 18 de octubre.
Dosis de poesía semanal
Basta con buscar en internet e inspeccionar las redes para notar que este movimiento no empieza ni termina acá, pero si se repite todos los martes, esta locura cultural se lleva adelante en El Emergente Bar (Gallo 333). Todos los miércoles, en el lado B, del club, se desarrollaba el clico “Circuito Cerrado, Poesía Estéreo” organizador Diego Arbit, Sebakis y Dogo Nauta.
Todos los jueves hay “Comedor de poetas” organizado por Gustavo Sidlin (escritor, poeta, director de cine, músico) en el ex Centro Cultural Pachamama, donde se juntan semana tras semana varios ávidos recitadores de poesía a desplegar su magia en el aire.
La poesía antaño estaba vista como algo estático, y de mera descripción. Hoy la poesía se devoró su propio concepto. La poesía habla siempre, de sí misma. Los temas más tratados son extraídos de la cotidianidad. Sorprende ver la cantidad de textos que hay en base a Facebook, redes sociales, interacciones modernas, celulares. Las banalidades sobrepasan el papel y lo inundan todo, pero de repente, las oraciones comienzan a construir y entre ladrillo y ladrillo de palabras, se escapan reflexiones profundas, manifiestos irreverentes, declaraciones liberadoras, ideas antipatriarcales y antisistemas se apoderan de la voz de quien las recita y hacen, en las cabezas que oyen atentas, una revolución de ideas, una alteración de paradigmas.
Diego Arbit uno de sus organizares una vez terminada la noche, concluyó “La pasé muy bien en este Slam, me pareció el mejor que hicimos. Pienso que el Slam se convirtió en el eje de un movimiento que abarca a un montón de gente, que se toma cada vez más en serio lo que es la poesía oral en Argentina. Creo que en este último se vio más que nunca que hay un montón de poetas que trabajan la palabra en escena muy bien. Me pone muy feliz ser parte de este movimiento de artistas”.
